El inglés antiguo hat significaba "caliente, ardiente, opuesto a frío," y se usaba para referirse al sol o al aire, al fuego, o a objetos que se calentaban. También podía describir algo "ferviente, feroz, intenso, excitado." Su origen se encuentra en el protogermánico *haita-, que también dio lugar al antiguo sajón y frisón het, al nórdico antiguo heitr, al medio holandés y holandés heet, al alemán heiß ("caliente"), y al gótico heito ("calor de fiebre"). Su procedencia es incierta, pero podría estar relacionada con el lituano kaisti ("calentarse"). Ambos términos podrían provenir de una palabra de sustrato.
En inglés medio, la vocal era larga (rima con boat, wrote), pero se acortó en el inglés moderno, posiblemente por la influencia del comparativo hotter. Como adverbio, se usaba en inglés antiguo hote.
El uso de hot para referirse a "deseo sexual, lujurioso" aparece alrededor de 1500. La connotación de "incitante al deseo" surge en el siglo XVIII. En la década de 1540, se registra el sentido gustativo de "picante, acre, mordaz." La acepción de "emocionante, notable, muy bueno" data de 1895, y la de "robado" se documenta por primera vez en 1925 (originalmente con la idea de "fácilmente identificable y difícil de deshacerse"). El uso para "radiactivo" es de 1942. En el contexto de la música jazz o grupos musicales, se emplea desde 1924.
Hot flashes en el sentido menopáusico se atestigua desde 1887. Hot stuff para referirse a algo bueno o excelente aparece en 1889, en inglés americano. Hot seat se registra en 1933. El término Hot potato en sentido figurado es de 1846 (proviene de la idea de una papa horneada en las brasas, difícil de sostener por su calor). Hot cake data de la década de 1680; la expresión sell like hot cakes se documenta en 1839.
Los términos hot y cold en juegos como el escondite o de adivinanza (siglo XIX) provienen de la caza (década de 1640), con la idea de seguir un rastro. Hot and bothered se registra en 1851. Hot under the collar en el sentido figurado de "furioso, enojado" aparece en 1881.